lunes, 10 de noviembre de 2014

La agonía de Fernando Alonso

A Fernando Alonso le gusta el ciclismo, pero a su manera. Desde hace ya varios años el rumor de que el piloto quiere un equipo en la UCI es cada vez más fuerte, parecía que el año pasado con las negociaciones con el desaparecido Euskaltel tendría una escuadra en la máxima categoría del ciclismo mundial, pero al final todo se torció, la escuadra naranja desapareció de manera agónica y Alonso no pudo satisfacer su deseo.
Este año parecía distinto, desde un principio se parecía que se iban dando los pasos en la dirección correcta pero todo de manera muy enigmática. Al final Paolo Bettini declaró “desafortunadamente, y por problemas que no me corresponde detallar, el proyecto Alonso está completamente detenido. Todavía no conozco las intenciones para el futuro” en la web noruega procyclong.no.


Fernando Alonso nunca ha sido claro a la hora de explicar qué quiere, cuando lo quiere y como lo quiere, casi siempre se han movido informaciones mediante rumorología más que con informaciones contrastadas, casi siempre era el “entorno de Alonso” y nunca o casi nunca nadie de su equipo por eso para los aficionados ha sido un jarro de agua fría tras otro, nunca ha sido de su boca una simple declaración sobre sus ideas, simplemente se dejaba ver en las mejores carreras.
Y es que, en ocasiones algunos lo veían como el salvador del ciclismo, una figura importante que volvería a creer en el ciclismo después de tantas malas noticias, y además la prensa española lo veía como el mecenas que llegaría en plan salvador, y a la vista de todo, quizás el Fernando Alonso Cycling Team vendrá, pero de momento, es mera rumorología.

domingo, 2 de noviembre de 2014

El declive de Beijing

La idea inicial no tenía mala pinta, crear una nueva carrera que fuera importante en la última parte del calendario del año y que además tuviera glamour con los mejores ciclistas del momento, el ex presidente de la UCI Pat McQuaid en su afán de globalizar el ciclismo creó el Tour de Pekín. Además el beneficio sería mutuo, tanto para la UCI como para China. Suponía una apertura al mundo occidental y de esta manera, parecería que China era un país normal.

Pero en el camino de todo, algo se le olvidó. La organizadora de la carrera estaba ligada a la UCI, ya que el hijo del mandamas era el organizador de la misma. Al principio todo fue bien, y los mejores ciclistas paseaban con sus ultimas novedades por las calles de Pekín frente al todopoderoso “aparato”, pero pronto todos se cansaron y fueron dando de lado a la carrera.
Este año la participación de los”galgos” del pelotón ha sido más bien escasa, y que a ultima hora Contador se borró por lo que ésto actuó como efecto dominó, ninguno de los grandes se puso un dorsal en Pekín y fue el punto de inflexión para la prueba que nació con muchas expectativas que poco a poco se han ido disolviendo.


Tanto los equipo como los corredores no les hace mucha gracia irse tan lejos a estas alturas de la temporada, por lo que en un futuro no muy cercano será una carrera más y casi sin importancia.

Fuente de la foto: as,com

viernes, 3 de octubre de 2014

Il Lombardía, la última gran oportunidad

Como y Bérgamo son dos localidades separadas por menos de 80 kilómetros pero que entre su sinuosa oreografía se disputa la última gran clásica de la temporada, Giro di Lombardía, o lo que es lo mismo la carrera de las hojas muertas por las fechas en las que se disputa.

La úlitma gran clásica del año para los especialistas en este tipo de carreras, que este año verán como por enésima vez su recorrido ha sido variado en proporción de las anteriores, la dirección alega que lo hace por el bien del espectáculo pero desde el punto de visto del aficionado se ve como un intento por parte de los organizadores que los grandes dominadores de años anteriores no sean los mismo cada año.

Los principales favoritos para este año desde nuestro punto de vista son:

Philippe Gilbert: el belga esta buscando el lugar que un día ocupó. Desde que ganara el maillot arcoiris no ha vuelto a ser el mismo, pero su Mundial de Ponferrada lo coloca como el principal favorito para volver a ganar una carrera que ya gané en años anteriores, además si lograra imponerse el domingo, volvería a ocupar su lugar en el ciclismo actual, el cual lleva un poco perdido desde que ficho por el BMC.

Fabiano Aru: su Giro de Italia lo ha puesto en el mapa actual. Es la nueva esperanza italiana para las carreras tanto de tres semanas como las grandes clásicas, veremos como llega de forma pero a buen seguro que esta pletórico.

Joaquín Rodríguez: el ganador de los últimos años se merece respeto pese a su año un poco intermitente, no tiene que demostrar nada pues sus resultados le avalan. Viendo su forma y estilo de correr muy favorito para alzarse por tercer año consecutivo como ganador de la carrera de las hojas muertas.

Rui Costa: su año como campeón del mundo ha pasado casi inadvertido, como suele ser la maldición del maillot arcoiris, pero sabiendo de su clase, la calidad de su equipo y su picardía lo podemos catalogar como favorito.

Alejandro Valverde: su estado de forma en el Mundial lo convierte en favorito, veremos como le responden las piernas después del año tan completo que lleva. Si sabe correr y la carrera no esta muy loca, puede ser uno de los outside favoritos.

Rinaldo Nocentini: viene de recuperarse de lesión, pero siendo italiano y siendo la carrera que es lo podemos catalogar como favorito. Es un clasicomano italiano que sabe correr este tipo de carreras.


Michal Kwiatkowski: el maillot arcoiris se estrena en la primera carreras después de ganar, solo el gran Paolo Bettini ha conseguido estrenar el maillot después de ganarlo, veremos si el polaco también puede conseguirlo, por clase y desparpajo no se puede dudar.

Fuente de la foto: gazzetta.it

martes, 30 de septiembre de 2014

La última creación de Patrick Lefevere

Patrick Lefevere tiene un don, el de descubrir ciclistas, pero más en particular en descubrir ciclistas para las clásicas, esas pruebas que para algunos son pruebas sin sustancia y sin embargo para otros son pruebas míticas.

Atrás quedan productos añejos pero con sabor a nuevo como el aquel León de Flandes Johan Museeuw que gobernaba con mano de hierro por los adoquines de Robaiux y su ejército Mapei que arrasaba cada vez que el Velódromo de Flandes se veía por el horizonte.

Su último producto tiene un apellido impronunciable, es polaco y se acaba de proclamar campeón del mundo en ruta en Ponferrada. Michael Kwiatkowski es su última creación. Desde su fichaje en 2012, sabía lo que podría tener entre manos, y de momento no ha errado el tiro.

Lo fichó del RadioShack, el equipo que comanda se fusionaba con el Omega Pharma, la crisis hizo que el Quick Step buscara aliados, para después de unos años dubitativos intentar volver a la senda del triunfo. Fichaba a un joven que había destacado en amateurs, pero que era posible que con el salto a profesionales, esas expectativas quedaran en papel mojado. Su primer año en el conjunto belga fue como Lefevere había pensado, adaptándose a las necesidades del plantel pero sabiendo de su potencial, su brutal Tour de Francia, en el que dejó asombrados a todos, menos a su mentor. Una undécima plaza era su carta de presentación al mundo.

El año siguiente sería el de su consagración, una etapa en Mallorca, la Vuelta al Algarve y la Strade Bianchi, su carrera más importante hasta el momento, pero lo mejor estaba por llegar, las carreras para las que el Quick Step esta hecho son la primavera y Kwiatkowski no se achantó, en las clásicas de las Ardenas fue quinto en la Amstel y tercero en Valona y Lieja. Lefevere se frotaba las manos.
Su Tour en contra no fue muy bueno, pero a su director le daba un poco igual, sabía que era una guerra perdida, por mucho que el polaco quisiera estar para la general.

Obvió la Vuelta para preparar bien el Mundial, concentrarse en altura en Livigno y aparecer en el Tour de Gran Bretaña donde fue segundo tras ganar una etapa. Ahora queda la duda de quien se impondrá a quién, si el polaco y sus ansias por luchar por una Vuelta grande, que seguro que la tiene en sus piernas o las ansias de su director de volver a comandar con mano de hierro las clásicas de primavera, como en los viejos tiempos. Si yo fuera OmegaPharma-Quick Step o Lefevere lo blindaría y le miraría a los ojos: Olvídate de la general del Tour. Sé enorme

 Fuente de la foto: vavel.com