El otro mito de Italia

Cuando hablamos de mitos del ciclismo, siempre se nos vienen los mismos, muy pocos tienen el titulo de campeonísimos, para los tifosi italianos en esa lista están: Coppi, Girardengo y nuestro protagonista Alfredo Binda.
Binda aunque nació cerca de Varese, se crio en el sur de Francia, en Niza, donde empezó a frecuentar la bicicleta, mas concretamente al velódromo, de ahí su físico de escalador y gran técnica de rodador. Abandona sus estudios y se dedica a la bicicleta, donde en Francia empezó a ganar un gran número de carreras menores.
Todo empezó en el Giro de 1925, llego sin hacer mucho ruido, puesto que la carrera estaba entre Girardengo y Brunero, la carrera siguió la tónica habitual, en las primeras etapas Girardengo se aupó al liderato, pero a partir de ahí, un desconocido llegado de Francia marco su ritmo y el camino hacia su primera victoria en Italia, Brunero no le perdonaría nunca la osadía, a partir de ese día aprovechaba cualquier ocasión para desprestigiarlo entre prensa y aficionados.
Al año siguiente, la mala suerte se cebo con el, en la segunda etapa se cayo lo cual dinamitó sus opciones, pero su rival Brunero también se cayo aun así, acabo segundo y gana cuatro etapas. El siguiente Giro da el puñetazo encima de la mesa, su superioridad es muy alta, empieza ganado de principio a fin, 12 de 15 etapas y aventajando a Brunero en mas de 27 minutos.
En los años 1928 y 1929 más de lo mismo, un carrusel de victorias, vapuleo a sus rivales. Gana tanto y con tanta facilidad que en el Giro de 1930 se produce una de las situaciones mas vergonzosas de la historia del ciclismo, el organizador del Giro, La Gazzetta dello Sport le propone correr con una bicicleta mas pesada o salir mas tarde para no ganar con tanta facilidad, sin embargo Binda se opone y el patrón del Giro Armando Gougnet le convence a su equipo para no participar a cambio de 22.500 liras, una cifra superior a la que pagaban al ganador de la prueba. Este bochornoso acuerdo emborrona su carrera, y parece que lo convierte en una maldición, en 1931 se cae en la 5ª etapa cuando iba líder, pero un año después no gana ni una etapa, y acaba en séptima posición.
En 1933, ya pocos cuentan con Binda, sin embargo como el ave fénix resurge de sus cenizas y vuelve a ganar, 7 etapas y entre ellas una contrarreloj, vuelve e inscribe su nombre como uno de los pocos con ganar 5 Giros junto con Coppi y Merckx.
Pero no solo de Giros vivía Bilda, en su palmarés hay todo tipo de carreras Giros de Lombardía, Giro del Piamonte, Milán-San Remo, campeonato de Italia de ruta e incluso un mundial de fondo en carretera.