lunes, 14 de noviembre de 2011

Subiendo al Alpe D'Huez al estilo Chava


Con él se va un tipo de ciclismo, el ciclismo a la vieja usanza, el ciclismo de atacar y no mirar para atrás, ni hacer caso del pinganillo. Su máximo valedor estaba en su propia familia, pero por causas de estar en diferentes equipos y tener diferentes intereses nunca pudieron disfrutar de disputarse alguna carrera.
Quizá uno de los días más felices de su vida fue en la cruz de la Demanda, su cuñado el “Chava” y él se habían escapado, se iban a jugar la victoria, pero su director por aquel entonces Manolo Sainz le hizo parar porque le necesitaban atrás, casi llegan juntos.
Y sin lugar a dudas, el peor momento de su carrera fue cuando falleció su cuñado, el mítico “Chava”, fue algo que nadie esperaba, pero supuso un palo para todos, en especial para el que sabía lo que a él le unía.
Siempre ha dicho que la figura de Manolo Sainz, tan malnostada por algunos, para él fue muy importante le enseñó a ser ciclista y mejor persona, pero como todo en esta vida, en algún momento la gente necesita ver otras cosas y decidió aceptar la propuesta de Riis en su CSC, además su rol cambiaria, por lo que poco a poco iba subiendo escalones.
Su victoria mítica en el Tour de Francia con el chupete de su hija Claudia le coloco en el nuevo mapa ciclista que dominaba el rey Armstrong, su jefe de equipo de entonces Hamilton le dio permiso para atacar y él no lo desaprovecho. Poco a poco, Riis iba tallando lo que quería un líder.
Y de pronto le dieron los galones del CSC, pues Basso estaba sancionado y el la única oportunidad real de ganar un Tour. Parecía una quimera, pero en 2008 fue su año, llego sin hacer ruido a Francia, después de la retirada de Armstrong todos estábamos esperando al nuevo rey, unos años de transición que él supo aprovechar.
Lo tenía todo de cara, pues el principal favorito Contador no iba participar porque a su equipo no lo habían invitado, había unos pequeños problemas, y en su propio equipo los hermanos Schleck, pero aún era muy joven, los galones eran suyos. Solo Evans parecía hacerle sombra, y de pronto quedaban dos etapas para llegar a Paris y él lo tenía todo de cara, pues esa etapa era en el Alpe D’Huez, no lo dudo, se disfrazó de “Chava” y ataco desde abajo, como lo haría su cuñado, poco a poco el tiempo correría a su favor, y al llegar arriba, amén de la etapa se vistió de amarillo, líder del Tour. Pero quedaba el día después, una contrarreloj larga, y él no es especialista. Pero no pasó nada, se salió, fue la contrarreloj más importante de su vida y no fallo.
Los Campos Elíseos se rendían al nuevo campeón, él se lo dedico a su cuñado y toda su familia. Al año siguiente su nuevo equipo alrededor de él, no colmo todas las expectativas, por lo que al final el proyecto Cervelo Test Team se fusiono con el Garmin, él se fue al GEOX, para ayudar en sus últimos años. Pero la gloria ya la tenía, quizá no es un corredor espectacular, pero siempre ha tenido algo, el año pasado acabó las 3 grandes algo muy complicado pues las piernas y la cabeza sufre muchísimo.
Su carrera es un modelo para los que vienen pues sus 26 grandes vueltas y sus pódiums son difícil se repetir, pues a falta de otras cosas tenia regularidad, algo muy difícil en el ciclismo, pero siempre estaba en la pomada por luchar por algo importante, gracias por hacernos disfrutar de ese motor diesel que has tenido, y ahora a descansar para afrontar tu nueva etapa.

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