Están por el buen camino por lo que parece, están preparando de manera eficiente sus carreras preferidas, Flandes y Roubaix, seguro que de manera muy distinta, uno en Tenerife y el otro en Bélgica. Pero ambos van por la senda del éxito.
En lugares diferentes han ganado, uno Prijs Vlaanderen y el otro en Gante, tanto monta. La locomotora de Berna se impuso como a el mas le gusta, es decir, solo, con potencia y sacando los colores a sus rivales, pero no contento con eso, su triunfo parecía tambalearse durante algunas partes de la carrera porque pincho durante algunas partes de la misma y al final tuvo que cambiar la bicicleta porque ya era demasiado. Ademas en un muro ataco, en la cima final del Oude Kwaremont le distanció del pelotón lo suficiente para hacerse con la clásica por segundo año consecutivo.
El otro, también especialista en la causa, triunfo y como a el mas le gusta, al sprint. Fue en su tierra mas concretamente en Gante. Esta carrera se tuvo que trabajar la victoria algo mas, porque la escapada del día, que llegó a tener cinco minutos de ventaja, se formó cumplida la primera hora de carrera con Thomas Voeckler (Europcar), Bram Schmitz (Veranda''s Willems), Romain Zingle (Cofidis), Steven Van Vooren (Mercator) y Albert Timmer (Skil-Shimano).
Su equipo tuvo que trabajar junto a otros, como el Garmin y el Leopard, pero al final, se llego al sprint, se impuso a Bennati y Farrar, vaya dos galgos, y se impuso con potencia.
Ambos están preparados para Flandes y Roubaix, pero hay que tener cuidado con los invitados a la fiesta Gilbert, Flecha, Hammond, Ballan, Langeveld, Booms. Monta tanto.
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